Este año se celebra el 500 aniversario de la primera vuelta al mundo en barco de Juan Sebastián Elcano, navegante español que logró esta proeza como capitán del único barco que regresó a España de la expedición capitaneada por Magallanes en el año 1522. Su objetivo: alcanzar las islas de las especias (Islas Molucas), en la actual Indonesia, atravesando el Océano Atlántico, bordeando América y ascendiendo por el Pacífico para establecer una ruta comercial. Negar el arrojo y la valentía de ambos navegantes, en aquellos tiempos, es como negar la belleza de la “Primavera” de Claude Monet.

Tan indiscutibles son ambas virtudes como seguramente lo fueron las numerosas vicisitudes que tuvieron a lo largo del trayecto o del tiempo que tardaron en culminar sus obras.

La incertidumbre del mercado

Y es precisamente, a lo largo de la primavera que acaba de empezar, cuando nosotros como inversores, cual aventureros a los que les gusta viajar y "conquistar" lugares o planificar una expedición con la meta de alcanzar y coronar la cumbre de una gran montaña, nos encaminamos a encarar las dificultades que surgen de introducir, en nuestra mochila de la toma de decisiones, una variable tan imponderable como la derivada del actual conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, que debido a la incertidumbre que genera en los mercados, nos impide ver con claridad nuestro destino. Y es que ni la renta variable (incluida la corrección del 1er trimestre) ni la renta fija (aún con el notable repunte de rentabilidades de las curvas de tipos de interés de los últimos meses), están precisamente baratas…

Llegados a este punto, cualquier inversor debería hacer de la necesidad una virtud y valorar, en su justa medida, dar un paso al frente, dejar el miedo a un lado y dar cabida a otros recursos y activos a través de fondos de inversión globales. De esta manera, podremos optar, con un vehículo altamente diversificado que además conlleve ventajas fiscales , al arduo objetivo de intentar no incurrir en rentabilidades negativas al final de este ejercicio.

Invertir en una combinación de activos

La historia nos enseña que los distintos activos presentan comportamientos diferentes en cada momento de mercado. No hay ningún activo que siempre ofrezca la mejor rentabilidad en cualquier entorno de mercado, según se puede ver en la siguiente tabla:

Por lo tanto, si invertimos en un solo tipo de activo, tendremos una única probabilidad de ganancia o pérdida, mientras que, invirtiendo en una combinación de activos, hay varias posibilidades de revalorización y se reduce la probabilidad de pérdidas. Pero no solo se puede diversificar por tipo de activo, también por geografía, sectores o divisas.

Debemos tener en cuenta las particularidades. Por ejemplo, a pesar de que la economía se encuentra cada vez más globalizada, el comportamiento de cada país sigue presentando sus propias particularidades y tendencias; así como determinados sectores tienen un mejor comportamiento en determinadas fases del ciclo económico o si hablamos de divisas, invertir en diferentes divisas para no exponer nuestras inversiones a las fluctuaciones de una única moneda. Nuestra cartera, en definitiva, necesita tener “mundo” y que este sea diverso. Los fondos de inversión son productos diversificados por su propia naturaleza, y dentro de estos, los productos mixtos/globales son aquellos que combinan la inversión en diferentes activos, áreas geográficas, sectores, divisas e incluso vehículos de inversión.

Adicionalmente, es fundamental la selección de compañías con capacidad para defender márgenes de beneficios e innovación e incorporar también grandes tendencias e inversiones alternativas para diversificar y mejorar la rentabilidad frente a la que puedan aportar los activos tradicionales.

La sostenibilidad es también una de las realidades más importantes en el radar de inversiones, dado el nivel de flujos de inversión de los sectores público y privado que se están canalizando para optimizar factores medioambientales, sociales y de buen gobierno corporativo. Santander Asset Management considera clave en la construcción de carteras incorporar la sostenibilidad y posicionarse junto a las compañías con estrategias de éxito para aprovechar las oportunidades de esta transición.

Inversiones a largo plazo

Aunque el trayecto se ponga cuesta arriba, es conveniente no perder la cabeza y tener una perspectiva estable sobre cuáles son los objetivos a largo plazo y el plan establecido, al igual que lo hicieron Magallanes y Elcano en 1519 cuando partió su expedición, tardando 3 años en alcanzar su hazaña. Con carácter general, cuanto más corto es el plazo de inversión, mayor es la variabilidad de las rentabilidades y menor es su previsibilidad. Al ampliar el horizonte temporal, el inversor tiene mayores probabilidades de obtener rentabilidad, reduciendo el riesgo.

No debemos dejarnos llevar por el contexto de mercado, y evitar tomar decisiones precipitadas que nos alejan del plan inicial y las metas. Estos momentos de volatilidad pueden ser una oportunidad para continuar navegando hasta buen puerto, con una cartera global y diversificada con enfoque de medio y largo plazo.


Publicado el 29 de abril de 2022

Recuerda que toda inversión conlleva riesgos, incluido ausencia de rentabilidad, pérdida del capital invertido y/o el riesgo de tipo de cambio para las productos denominados en divisa distinta del €.

Este artículo ha sido redactado sin ánimo de exhaustividad y con efectos meramente informativos por Santander Asset Management, sin que el mismo suponga ningún tipo de asesoramiento o recomendación por parte de Open Bank, S.A. Open Bank, S.A. declina cualquier responsabilidad por la emisión del presente artículo.

Este documento contiene información recopilada de varias fuentes. La información contenida en el presente documento puede haber sido recopilada de terceros. Todas estas fuentes se consideran fiables, si bien la exactitud, integridad o actualización de esta información no está garantizada, ni de forma expresa ni implícita, y está sujeta a cambios sin previo aviso por Santander Asset Management.