El Mes del Orgullo

Ha llegado junio; el mes en el que el colectivo LGBTIQA+, junto con el apoyo de todas las personas aliadas, celebran el Mes del Orgullo, la diversidad y la inclusión. Aunque el Día del Orgullo LGBTIQA+ (antiguamente mal acuñado “Día del Orgullo Gay”) es el 28 de junio, debido a la repercusión social y mediática y a la cantidad de eventos que se celebran, llevamos años ya asociando junio al mes del Orgullo.

La elección del Día Internacional del Orgullo LGBTIQA+ no fue un capricho. Ese mismo día, pero en 1969, un grupo de trans* y drag queens se rebelaron contra la policía de Nueva York, oponiéndose a mostrar sus documentos identificativos, en una de las frecuentes redadas que acometían en los locales de Greenwich Village.1 Si tu expresión de género no encajaba con el género y nombre que te asignaban al nacer, tenías un problema.

El relato de que los disturbios de Stonewall Inn (así se llamaba el local donde ocurrió todo) fueron protagonizados por hombres homosexuales blancos, de buen estatus social y poder económico, que estaban cansados de la falta de libertad, no es del todo correcto. Las verdaderas abanderadas del movimiento de liberación LGBTIQA+ fueron travestis, trans* y drag queens2, gente racializada, y discriminada (incluso dentro del colectivo), entre las que encontramos iconos como Marsha P. Johnson o, su inseparable amiga, Sylvia Rivera, hoy día, grandes heroínas de la historia del colectivo.3

Tras la primera noche de disturbios, el colectivo tomó conciencia de sí mismo y aparece el “movimiento de liberación LGBTIQA+”. Un año después, en 1970, tendría lugar la primera marcha del Orgullo “Gay” de la historia, llamada “Día de la Liberación de Christopher Street”, que promulgaba un mayor número de derechos para gays, lesbianas y transexuales.

53 años después, seguimos necesitando celebrar este día, por incontables motivos: visibilidad y normalización de personas LGBTIQA+ en espacios de trabajo; acabar con el maltrato y la discriminación de las personas más desfavorecidas dentro del colectivo, como las personas trans*; educar en valores de diversidad y tolerancia a las nuevas generaciones; reclamar leyes que respalden, protejan y defiendan los derechos laborales y sociales del colectivo; defender todo el avance conseguido a lo largo de los años y un largo etcétera.

¿Celebración o reivindicación?

El término gay para hacer alusión a alguien homosexual deriva del adjetivo en inglés (en desuso), como sinónimo de feliz, brillante o atractivo. Algo gay era simplemente algo divertido.4

Por eso, a día de hoy, el Orgullo se celebra. Sin embargo, es necesario ayudar a comprender, a través de la empatía, que las celebraciones del Orgullo son, intrínsecamente, una reivindicación. No por festejar el colectivo rechaza el lado humanitario de la manifestación: la realidad de que hay que seguir defendiendo los derechos de las personas más vulnerables, aquellas que, por el hecho de “ser diferentes”, son discriminadas.

Como dice un divertido eslogan: “Normal, es un programa de mi lavadora”. Porque lo normal, es que todos seamos diferentes. Y ahí es donde reside el verdadero poder del mensaje: la diversidad es riqueza.5

El poder de los símbolos

Esa diversidad, expresada a través de la bandera arcoíris, es uno de los símbolos más potentes del colectivo. Popularizada en 1978 y creada por Gilbert Baker6, inicialmente contaba con ocho franjas de color. Un año más tarde se simplificó, conformando la bandera que conocemos hoy como “la bandera de la diversidad”.7 Desde entonces, el arcoíris ha acompañado al colectivo.

Pero no es el único símbolo existente: desde el Triángulo Rosa invertido8 hasta el Símbolo de Igual9; pasando por la gran diversidad de banderas LGBTQIA+ (bandera inclusiva, trans, bisexual, intersexual, etc.).10

Los símbolos son importantes, porque representan conceptos. Son los que nos recuerdan el camino que ya se ha recorrido y los derechos y libertades que se han conseguido gracias al trabajo y activismo de muchas personas de la comunidad LGBTIQA+.

Openbank, Open&Out

En Openbank, los valores de inclusión, tolerancia y diversidad son parte integral de nuestra filosofía como empresa, por lo que uno de nuestros principales objetivos es crear espacios seguros y respetuosos para todos.

Nuestra plantilla se compone de más de 30 nacionalidades con una edad media de 36 años y podemos decir bien alto que nuestros empleados tienen diferentes clubs sociales que apoyan diferentes causas, como Women@Openbank o Social Impact Club.

Entre ellos está el Club Open&Out, liderado por y para empleados, que promueve acciones tanto dentro como fuera del banco. Gracias a él, estos valores son una realidad en nuestro día a día.

Mostremos los colores del amor y la diversidad, creando una sociedad más justa e inclusiva.


Publicado el 28 de junio de 2022

1La historia de Sylvia Rivera, la activista trans que protagonizó la revuelta de Stonewall.
2The Death and Life of Marsha P. Johnson
3Monumento a dos activistas trans en New York.
4Sobre la palabra «gay»: etimología, plural y pronunciación
5La diversidad LGBT en el contexto laboral en España
6Wikipedia - Gilbert Baker
7Orgullo Gay: Breve Historia de la Bandera LGBT
8Wikipedia - Triángulo Rosa
9Equality for All, not for some
10Conoce el significado de las banderas LGBT+